martes, 14 de septiembre de 2010

Lejania


Hoy someteré a juicio a lejanía
Esa descalza y maloliente niña
Que se presente la serafina
O es que tanto desprecio lacero su lengua fina

Que pase el primer testigo
Que venga el cerdo que traga los higos
Dime porque acusas a tan achispada niña
… y empieza a gritar que es ella es ella
La delgada sombría y perspicaz serafina
La que un día de veintidós horas
Se hizo mi prometida
Yo invoco al dios de los groseros
El cual oculto anda en las fabulas de esopo
A vengar lo que le hicieron a este paquidermo

Y el llanto es amigo del obeso
Oh fascinante serafina muchacha acalambrada
Oh que perversa eres lejanía niña desquiciada
Que pase el segundo testigo
Que venga el tulipán con cuerpo de erizo
Dime porque imputas a tan secuaz niña
Perdone mi modestia señor viento
Pero como retoño de un narciso
Y primo del fastidio
Yo acuso a lejanía tan linda serafina
Que me desmenuzo los pétalos
que yo en un inaccesible futuro tenia

Ella vino del pasado para descarriarme los hábitos
Yo en un paraje sentado y disfrutando de mi sonrisa
Pensé que tan atolondrada niña
Solo era lo que la madre del Olimpo llama “mitos”
Oh pero en mi diligencia de ser etéreo
Caí en sus redes de Morfeo
Y me perdí en el graznar de su silencio
Qué vergüenza esa tal negligencia

Oh bulímica serafina te han culpado de nuevo
Oh cómo pudiste hacer ello al hijo del deseo
Que pase el tercer testigo
La mueca de angustia sin rostro
Ella como representante del fallecer de los otros
Dime que hizo ahora esta púber lejanía

Hizo fallecer a mil monstruos
Esas damiselas y caballeros
Que tenían la forma de los monos
Que se hacían decir hombre y mujer
Y que usaban la pululación como algo exótico
Ellos que siempre tenían la razón
Seres creados con redundante perfección
Pues fueron hechos tal como el creador
Ella, lejanía aplasto a muchos
Les saco el sentimiento del amor
Los hizo enfermar, alterar su cinismo...Tan bello valor
Casi les arranca toda esa hipocresía bien amada
Y les corto la mediocridad tan sagrada
Ella les convido el suicidio
Y los envió al lascivo retiro!
Les indujo a sumergirse en el mar fosco
Los cubrió de algo muy deshonroso
Esa niña serafina lejanía que desambiguo a tantos ojos
Deben darle por tal ingratitud a la existencia
La pena de someterla a la más alegre decadencia

Oh lejanía ya escuchaste el sonido de las cadenas que te llaman
Oh serafina ya está tu celda esperando tu presencia
No escupirás nada lejanía
Se te atasco la garganta
Niña repugnante y flemática
Muéstrame el rostro por lo menos
Muéstrame las palmas de tus manos
Estás oyendo lejanía
Porque no contestas tonta niña…

Y se vio que aquel juicio estaba cubierto de nieve ofuscada
Lejanía con ello les asolaba con sus vestir doloroso que nostalgiaba


dedicado a lejania...

No hay comentarios:

Publicar un comentario